Nada más feo que creer que la vida te repartió malas cartas. Nada más antiestético que amargarse por la belleza ajena. Nada más horripilante que estar embebido de ti mismo.
Los propios dioses
Nada más feo que creer que la vida te repartió malas cartas. Nada más antiestético que amargarse por la belleza ajena. Nada más horripilante que estar embebido de ti mismo.
Resumiendo, dejémonos de tonterías y dediquémonos a vivir, que de eso se trata.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Eso mismo!!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Joder, qué bueno, me gusta.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Amén, nada más que añadir.
Me gustaLe gusta a 1 persona